La empresa Tesla, de Elon Musk, lanzó oficialmente su servicio de robotaxi en Austin, Texas, lo que marca un paso crucial en la trayectoria de conducción autónoma de la compañía de vehículos eléctricos.

El lanzamiento limitado comenzó el domingo 23 de junio, con una pequeña flota de vehículos eléctricos que operan sin conductores humanos detrás del volante.

Musk, CEO de Tesla, describió el momento como la "culminación de una década de arduo trabajo".

Se vio a pasajeros siendo recogidos en South Congress, Austin, por Teslas sin conductor, cada uno con un monitor de seguridad en el asiento delantero.

Según INC, Musk reveló en X (anteriormente Twitter) que el viaje cuesta solo 4,20 dólares, un precio que refleja su humor característico y su marca.

"De esto se trata el rock and roll", escribió Musk celebrando el logro. Enfatizó que Tesla desarrolló internamente tanto el chip de IA como el software.

Para promocionar el lanzamiento, Tesla invitó a influencers a probar el nuevo servicio. Sawyer Merritt, inversor de Tesla y usuario de redes sociales, publicó videos de su experiencia usando el robotaxi para ir a un restaurante local, lo que desató el entusiasmo entre los fans.

A pesar del entusiasmo, los expertos advierten que este es solo un pequeño primer paso. Philip Koopman, profesor de la Universidad Carnegie Mellon, afirmó que el éxito en Austin aún dejaría a Tesla lejos de crear una red nacional o global de robotaxis.

"Este es el final del principio, no el principio del fin", señaló.

Texas exige permisos para vehículos autónomos antes del lanzamiento de Tesla

A medida que avanza el programa de robotaxi, se perfilan nuevas regulaciones. Tan solo dos días antes del lanzamiento, el gobernador de Texas, Greg Abbott, firmó una ley que exige permisos a las empresas que operan vehículos autónomos.

A partir del 1 de septiembre, el Departamento de Vehículos Motorizados de Texas supervisará estos permisos, con el poder de revocarlos si surgen problemas de seguridad.

La ley también exige que las empresas compartan los procedimientos de emergencia con el personal de primera respuesta, haciendo de la seguridad una máxima prioridad.

Si bien es menos estricta que las normas de California, la nueva ley de Texas muestra un cambio hacia una supervisión más cautelosa.

El lanzamiento actual de Tesla evita condiciones riesgosas, como mal tiempo o intersecciones complejas, y los autos no transportarán pasajeros menores de 18 años, dijo NY Post .

Musk dijo que Tesla sería "súper paranoico" en cuanto a la seguridad y podría retrasar o ajustar las operaciones si fuera necesario.

El modelo robotaxi de Tesla se diferencia de competidores como Waymo y Zoox al depender únicamente de cámaras en lugar de sistemas de radar o lidar más costosos.

Musk afirma que esto hará que la tecnología sea más segura y más barata a largo plazo.