Conocida como la ciudad de la eterna primavera, Medellín está reinventando su oferta turística. Más allá de los clásicos recorridos por el Pueblito Paisa o el Metrocable, la urbe colombiana abre sus puertas a un tipo de visitante diferente: aquel que busca aprender, crear y conectar con la cultura local. ¿La novedad? Experiencias únicas lideradas por artesanos, chefs y artistas que permiten a los turistas ser protagonistas, no solo espectadores.

A través de la plataforma Airbnb, viajeros de todo el mundo están encontrando una nueva forma de conocer Medellín. No se trata solo de dormir en un apartamento con vista a El Poblado. Ahora es posible tejer una mochila tradicional con un artesano indígena, diseñar una postal inspirada en el skyline de la ciudad o preparar platos secretos en una cocina escondida.

El nuevo turismo cultural de Medellín

Entre las propuestas más buscadas está la experiencia de crear una mochila colombiana desde cero. Guiados por con un diseñador local y utilizando fibras naturales, los viajeros aprenden técnicas ancestrales de la comunidad Iku. No es un simple taller: es un viaje hacia las raíces de la artesanía colombiana. Cada visitante regresa a casa no solo con una bolsa tejida por sus propias manos, sino también con un conocimiento más profundo del legado indígena.

Experiencias de Airbnb en Medellin
Cortesía

Para quienes prefieren el arte, una artista local formada en Florencia ofrece un taller íntimo con vistas panorámicas de Medellín. Allí, pincel en mano, cada participante crea su propia postal de recuerdo, mientras descubre la escena artística emergente de la ciudad.

Pero si de experiencias literarias se trata, Medellín también tiene algo diferente que ofrecer. Un paseo por sus librerías más icónicas concluye en una tertulia con escritores locales. El recorrido incluye encuentros con libreros, cafés de autor y hasta la oportunidad de escribir un poema dedicado a un ser querido. Una propuesta perfecta para los viajeros amantes de las palabras.

Experiencias de Airbnb en Medellin
Academia Boticelli/Cortesía

El encanto de las flores y la cocina oculta

Ningún viaje a Medellín estaría completo sin sumergirse en la tradición silletera con un artesano de flores. Una experiencia permite a los turistas visitar la Casa de las Flores y conocer, con los cereadores locales, cómo se elaboran las icónicas silletas que desfilan cada año en la Feria de las Flores. La actividad concluye en las colinas de Santa Elena, donde los visitantes arman su propia creación floral.

Y para los paladares más inquietos, la propuesta gastronómica también rompe esquemas. En Gabriela, un laboratorio de cocina oculta, la comida sucede al centro de la mesa. Platos inesperados y bebidas de autor se comparten en un ambiente donde el chef es también el anfitrión. Más que una cena, es una experiencia culinaria inmersiva.

Turismo con propósito: conectar, aprender y crear

Lejos de ser simples actividades turísticas, estas experiencias reflejan una tendencia global: los viajeros ya no buscan solo "ver", sino vivir la cultura de los destinos. Medellín, con su mezcla de tradición e innovación, se posiciona como un epicentro del turismo creativo en América Latina.

Airbnb, la plataforma que conecta a anfitriones con viajeros en todo el mundo, ha sido clave en este movimiento. Desde su nacimiento en 2007 en San Francisco, ha pasado de alquilar habitaciones a ofrecer experiencias que acercan a los visitantes a la verdadera esencia de cada ciudad. Medellín es ahora uno de esos puntos en el mapa.

Para quienes piensan visitar Colombia, la recomendación está clara: no se conformen con observar. En Medellín, la invitación es a crear.