La noticia de que Estados Unidos estaba contemplando hacer un programa de telerrealidad para poner a gente a competir por los papeles causó un gran revuelo y no de forma positiva. De hecho, para muchos se trataba de un rumor falso. Sin embargo, no solo es verdad, sino que su productor está dando la cara y defendiéndolo.

En una nueva entrevista con NewsNation, Rob Worsoff afirmó que el programa sería una "celebración de Estados Unidos de la manera más positiva posible".

El programa propuesto fue noticia la semana pasada tras revelarse que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) lo está considerando. Según el informe original, publicado inicialmente por The Daily Mail, inmigrantes previamente seleccionados competirían en concursos en todo Estados Unidos para obtener un estatus legal acelerado. Titulado The American, el programa busca integrar el entretenimiento televisado con el proceso de inmigración.

Worsoff declaró a NewsNation que el programa pretende ser un homenaje a los ideales estadounidenses, no un espectáculo. "Esto no es 'Los Juegos del Hambre' para migrantes", declaró al medio. "Lo único que ofrezco es pasar al frente de la fila". Enfatizó que todos los participantes ya estarían en el sistema de inmigración estadounidense y serían preseleccionados para determinar su elegibilidad. El ganador obtendría un trámite acelerado para su estatus legal, mientras que los finalistas también serían considerados más rápidamente.

El programa seguiría a doce concursantes a medida que llegan a Ellis Island y abordan un tren llamado "The Citizen Ship", viajando por el país y compitiendo en tareas temáticas diseñadas para resaltar elementos de la historia, la industria y la cultura estadounidenses.

Los concursantes perdedores se irían a casa con premios "icónicos estadounidenses", que se sugería que incluirían un millón de puntos de American Airlines, una tarjeta de regalo de Starbucks de 10.000 dólares y un suministro de por vida de 76 gasolina.

Worsoff también afirmó que la propuesta había sido presentada a las administraciones de Obama, Trump y Biden en años anteriores, y que los tres fueron receptivos a la idea, pero no se materializó.

El concepto del programa ha suscitado inquietud entre expertos en inmigración y comentaristas, quienes cuestionan la imagen de presentar la residencia legal como el resultado de un concurso televisivo. El representante de Texas, Joaquín Castro, lo calificó de "una idea enfermiza" durante el fin de semana.