Lalo Schifrin, el legendario compositor latino detrás de la música de las películas 'Harry el sucio' y 'Misión: Imposible', muere a los 93 años

Lalo Schifrin, el compositor argentino que incorporó ritmos latinos, jazz y maestría clásica a algunas de las bandas sonoras más icónicas de Hollywood, incluyendo el tema de Misión: Imposible, falleció. Falleció el 26 de junio de 2025 en su casa de Los Ángeles. Tenía 93 años.
Nacido como Boris Claudio Schifrin el 21 de junio de 1932 en Buenos Aires, Argentina, Schifrin creció rodeado de música. Su padre, Luis Schifrin, fue concertino de la Filarmónica de Buenos Aires. Desde pequeño, Lalo combinó su formación clásica formal con una profunda pasión por el jazz, una combinación inusual que se convirtió en su sello distintivo.
Tras estudiar piano en el Conservatorio de París con el afamado compositor Olivier Messiaen, Schifrin se sumergió en la escena jazzística europea, actuando en clubes nocturnos y perfeccionando sus habilidades compositivas durante el día. Su formación multicultural —raíces argentinas, tradición clásica europea y jazz afroamericano— daría forma posteriormente a las bandas sonoras de la cultura pop estadounidense.
La carrera de Schifrin despegó al unirse al quinteto de Dizzy Gillespie como pianista y arreglista. Juntos grabaron el revolucionario álbum Gillespiana, que fusionó el jazz con influencias latinas y africanas y vendió más de un millón de copias. Ese éxito lo llevó a Hollywood, donde su sonido único captó la atención de cineastas que buscaban algo audaz y diferente.
Su música cambió para siempre el sonido de la televisión y el cine. El tema de Misión: Imposible , escrito en un inusual compás de 5/4, se convirtió en una de las melodías más reconocibles del mundo, utilizada no solo en la serie original de 1966, sino también en la exitosa franquicia cinematográfica protagonizada por Tom Cruise.
Los créditos cinematográficos de Schifrin incluyen Bullitt (1968), Harry el sucio (1971), Operación Dragón (1973) y Horror en Amityville (1979), entre muchos otros. Su estilo característico, que combina jazz, funk y elementos sinfónicos, redefinió el sonido del cine de acción, crimen y suspense de la década de 1970 en adelante.
A lo largo de su carrera, Schifrin recibió seis nominaciones al Óscar y cinco premios Grammy. En 2018, recibió un Óscar honorífico por su contribución a la música cinematográfica, entregado por su colaborador habitual, Clint Eastwood.
Incluso en su vejez, Schifrin nunca dejó de componer. En abril de 2025, pocos meses antes de su fallecimiento, estrenó ¡Viva la Libertad! en el Teatro Colón de Buenos Aires, un homenaje sinfónico a su tierra natal que fusionaba la música folclórica argentina, la sinfonía clásica y el jazz.
Lalo Schifrin fue más que un compositor. Fue un puente cultural, un innovador latino cuya música trascendió fronteras y géneros. Su obra sigue inspirando a generaciones de músicos, cineastas y aficionados de todo el mundo.
Le sobreviven su esposa, Donna, y sus hijos.
Schifrin dijo una vez: "La música es el lenguaje del alma". Su alma resuena ahora en algunas de las bandas sonoras más inolvidables de la historia.