La artista mexicana Angélica Vale y el productor y empresario cubano Otto Padrón han puesto fin a su matrimonio de 14 años y a su relación de casi una década. La noticia del divorcio, que se difundió el domingo en la noche cuando la prensa del espectáculo descubrió la demanda de disolución de los vínculos nupciales, presentada ante un tribunal de Los Ángeles.

Según el documento, la pareja se separó oficialmente en abril de este año. Las leyes californianas establecen un plazo de al menos seis meses de no vivir juntos para aceptar la demanda de divorcio. Al cumplirse este plazo, fue Otto Padrón quien decidió dar el paso legalmente.

Ante la noticia y con el profesionalismo que la caracteriza, Angélica Vale decidió comunicarse directamente con su público.

En el texto, queda claro que, al menos para ella, la prioridad es llevar todo tranquilamente por el bien de Angéliquita y Daniel, los hijos que tienen en común. "Elegimos la paz por encima de cualquier sentimiento que implica el final de algo soñado para toda la vida, sobre todo por nuestros hijos, quienes nos mantendrán unidos por siempre", escribe la también conductora de radio y presentadora.

"Agradezco a Otto, el padre de mis hijos, lo compartido y le deseo lo mejor. Lo aprendido durante nuestro matrimonio me hace la persona que soy hoy, la de siempre pero con más sabiduría y un largo camino para aún crecer", agregó.

Acá está el texto completo de su carta:

Desde que nací, ustedes han compartido conmigo toda mi vida, los momentos felices y los difíciles, las alegrías y las tristezas. Por ello, este momento no será la excepción.

Después de muchos años juntos y dos milagros, nuestros hijos, la historia de amor entre Otto Padrón y yo, desafortunadamente, se termina. Hemos decidido ponerle fin de manera legal a nuestro matrimonio de 14 años.

A veces, detrás de las risas se esconden batallas que como adultos tenemos que afrontar y esta es una de ellas. Elegimos la paz por encima de cualquier sentimiento que implica el final de algo soñado para toda la vida, sobre todo por nuestros hijos, quienes nos mantendrán unidos por siempre.

Ustedes saben que Angélica y Daniel son el centro de mi mundo. Quiero seguir siendo un ejemplo para ellos. Primero, como una madre dedicada y amorosa con ellos, pero también como una mujer que sale adelante sin importar la circunstancias.

Agradezco a Otto, el padre de mis hijos, lo compartido y le deseo lo mejor. Lo aprendido durante nuestro matrimonio me hace la persona que soy hoy, la de siempre pero con más sabiduría y un largo camino para aún crecer.

Estoy y estaré profundamente agradecida con ustedes, el público, mis amigos, la prensa, los medios, por el apoyo y cariño constante y sé que cuento con su empatía y sus apapachos.

Mañana cumplo 50 años y despido esta mitad de siglo, dándole la bienvenida a una nueva etapa con la que espero seguir contando con ustedes. Tengan la seguridad de que ustedes seguirán contando conmigo.

Los amo, Angélica Vale