Una iglesia en Evanston, Illinois, ha convertido sus decoraciones navideñas en una auténtica polémica. El Niño Jesús yace en el pesebre con las muñecas atadas esposas plásticas. María y José llevan máscaras de gas. Vigilando toda la escena hay figuras enmascaradas vestidas como soldados romanos, pero con un toque moderno: sus chalecos llevan la inscripción ICE en letras grandes.

La Iglesia de Lake Street en Evanston, a unos 24 kilómetros de Chicago, montó la exhibición el 25 de noviembre con la ayuda de voluntarios. La iglesia publicó fotos en Facebook junto con una explicación detallada de su mensaje. La figura del bebé está envuelta en una de esas finas mantas de emergencia que la gente asocia con los centros de detención.

"Esta instalación reimagina el nacimiento como una escena de separación familiar forzada, estableciendo paralelismos directos entre la experiencia de la Sagrada Familia como refugiada y las prácticas contemporáneas de detención de inmigrantes", escribió la iglesia. Explicaron que la manta de emergencia "hace referencia a los materiales utilizados en los centros de detención", mientras que las bridas en las muñecas del bebé "evocan directamente a los niños que fueron atados con bridas por agentes durante una redada en un edificio de apartamentos de Chicago a principios de este año, donde la mayoría de los residentes eran ciudadanos estadounidenses".

¿Por qué máscaras de gas y gases lacrimógenos?

Las máscaras de gas de María y José tampoco son casuales. La iglesia, en su publicación, declaró que "hacen referencia al uso documentado de gas lacrimógeno y otras armas químicas empleadas por agentes del ICE contra manifestantes pacíficos, periodistas y miembros de la comunidad que abogan por una reforma migratoria".

El reverendo Michael Woolf ha vivido personalmente estos enfrentamientos. El 14 de noviembre, fue arrestado durante una protesta frente a unas instalaciones del ICE en Broadview, Illinois. Hay fotos suyas tumbadas boca abajo en la acera que circulan por redes sociales.

La iglesia no se anduvo con rodeos: "Esta instalación no es sutil porque la crisis que aborda no es abstracta". Esperan que los espectadores "se unan a la conversación sobre lo que significa el santuario cuando las familias que huyen de la violencia se enfrentan a la separación, la detención y la deshumanización".

La tormenta de fuego de Facebook

La publicación provocó un acalorado debate en la sección de comentarios. "¿Blasfemar mucho?", comentó alguien. Otra persona lo llamó "La iglesia del diablo". Otro usuario de redes sociales publicó una larga explicación: "José y María fueron a Belén porque tenían que regresar a la casa ancestral de José para ser contados en el censo. Así que Trump simplemente está siguiendo ese ejemplo y enviando a la gente a casa por obligación legal".

Alguien más escribió: "Nada expresa más alegría y amor por Cristo que convertir su nacimiento en un espectáculo". Otro dijo: "Despierto. No es una iglesia verdadera. Esta iglesia es parte del mundo, no de la verdad". Otro expresño: "Usar el nacimiento de Cristo para difundir un mensaje totalmente diferente. Honren al Rey de reyes... si realmente es su rey".

Pero muchos otros usuarios defendieron a la iglesia. "Muchísimo respeto a esta iglesia por su audaz representación de la Natividad", escribió un simpatizante. "Espero que esto haga que la gente se detenga a reflexionar sobre las terribles cosas que les suceden a los inmigrantes y ciudadanos de este país". Alguien más dijo: "Gracias por su buen trabajo y por arrojar luz sobre la oscuridad". Otro: "Lamentablemente, esta es la mejor representación de la historia".

La exhibición ya sufrió daños. La máscara de gas de María desapareció y alguien cortó las bridas de las manos del Niño Jesús. Woolf invitó a la gente a venir el sábado para ayudar a restaurarla.

Thanks to Loretta, Kelli, Jack, and Miller for their help setting up our nativity display this morning. This installation reimagines the nativity as a scene of forced family separation, drawing...

El panorama más amplio

El presidente Trump envió a la Guardia Nacional a Chicago en septiembre, lanzando la Operación Midway Blitz. Se están llevando a cabo medidas represivas similares en Los Ángeles, Washington D. C. y Nueva Orleans.

Los registros del Departamento de Justicia muestran que 600 personas fueron arrestadas en Chicago, pero sólo 16 tenían antecedentes penales, apenas el 3 por ciento, lo que plantea preguntas sobre quiénes están realmente en la mira.

La iglesia abordó este tema en su publicación, calificándolo de "un duro recordatorio de que el terror policial no discrimina por estatus migratorio". Concluyeron con un desafío: "La Sagrada Familia eran refugiados. Esta no es una interpretación política, es la realidad descrita en las historias que nuestra tradición ha contado y repetido durante milenios. Al presenciar esta historia familiar a través de la realidad que enfrentan los migrantes hoy, esperamos recuperar su cariz radical y preguntarnos qué significa celebrar el nacimiento de un niño refugiado mientras rechazamos a quienes siguen sus pasos".

La Iglesia de Lake Street ya ha realizado exhibiciones provocativas, incluyendo una el año pasado que mostraba al Niño Jesús entre escombros para visibilizar la situación en Gaza. Que este belén sea profético o blasfemo probablemente dependa de tu postura sobre la inmigración. Pero nadie lo ignora.