Una canción del último álbum de Keith Urban está siendo señalada como un anuncio de la crisis matrimonial que vivía con Nicole Kidman, ahora que la pareja se está divorciando tras 19 años casados.

Según The Music Times, los fanáticos del artista australiano de música country se han centrado en una canción en particular, "Love Is Hard", y la letra suena diferente ahora que el divorcio de la pareja es público.

La canción trata sobre una relación que sufrió debido al silencio, la incomprensión y las peleas que no se resolvieron lo suficientemente profundamente. En un momento dado, el cantante pregunta: "¿Te darías cuenta si no volviera a casa este fin de semana?". En otro verso, admite: "Duele cuando peleamos, nena. Es peor cuando no decimos nada".

El disco también captura la forma en que se construye el resentimiento, con referencias a "Insultar y dar portazos / Y guardar secretos, llevar la cuenta".

Aun así, el estribillo habla de perseverar. "No importa lo que digas / No me rendiré", canta el narrador, y luego añade: "Nunca podría odiarte... pero no puedo dejar que te vayas".

"Love Is Hard" fue escrita por Eren Cannata, Justin Tranter y Shane McAnally.

Como señaló Daily Mail Australia, no hay ninguna sugerencia de que la canción hable directamente de Kidman, pero se la está interpretando como una ventana a las luchas privadas que Urban puede haber estado enfrentando.

En los meses previos a la separación, Urban había estado de gira mientras Kidman filmaba proyectos consecutivos.

Una fuente cercana dijo que el tiempo que pasaron separados la dejó "sorprendida" cuando el matrimonio terminó. Otra fuente musical de Nashville declaró al Daily Mail que la ciudad bullía con especulaciones de que Urban "está con una mujer más joven en el negocio", aunque no se ha confirmado su identidad.

Los procedimientos de divorcio se tornan tensos

Según documentos obtenidos por PEOPLE, Kidman fijó el 30 de septiembre como fecha de separación de la pareja. Se le concedió la custodia principal en un plan de crianza que le otorgaba 306 días con sus hijas, en comparación con los 59 de Urban.

Ninguno de los dos pagará la manutención de los hijos y ambos acordaron no menospreciarse mutuamente ni pública ni privadamente.

Otra fuente dijo a PEOPLE que el divorcio "se está volviendo dramático" y agregó: "Nicole está herida y se siente traicionada. Quería salvar su matrimonio y creía que podía, pero parece que él ya siguió adelante".

La solicitud también exige que ambos padres asistan a un seminario dentro de los 60 días y que alienten a sus hijas a permanecer cerca de cada padre.