El ícono del rock Mick Jagger demostró que su poder estelar sigue intacto al acaparar todas las miradas en el Baile del Museo Británico en Londres, acompañado por tres mujeres que han definido diferentes épocas de su vida: su ex esposa Bianca Jagger, su pareja de larga data Jerry Hall y su prometida Melanie Hamrick, 44 años menor que él.

El líder de los Rolling Stones, ahora con 81 años, encarnó sin esfuerzo a la realeza del rock en el evento de gala, que combinó glamour, nostalgia y el magnetismo perdurable de un hombre que ha dominado los escenarios durante seis décadas.

La realeza del rock domina la noche

Jagger llegó con gran estilo, irradiando la misma arrogancia que lo convirtió en leyenda. El Baile del Museo Británico, celebrado el 18 de octubre, reunió a la élite cultural londinense, pero fue el cantante de los Rolling Stones quien acaparó la atención. Los invitados comentaron que se le veía "enérgico y lúcido como siempre", una prueba de su continua vitalidad.

Jagger sigue imparable: continúa de gira, grabando y cautivando a fans de todo el mundo más de sesenta años después de que los Stones alcanzaran por primera vez las listas de éxitos.

El elegante regreso de Bianca Jagger

Bianca Jagger, la activista de derechos humanos nacida en Nicaragua que se casó con Mick en 1971, en el apogeo del estrellato de los Rolling Stones, estuvo entre los asistentes. Bianca asistió al evento luciendo un elegante traje blanco y un sombrero de ala ancha, evocando sus días en Studio 54.

Aunque su matrimonio terminó en 1978, la pareja ha mantenido una relación cordial a lo largo de los años. Su asistencia al evento fue un homenaje a un pasado común que caracterizó toda una era del rock, una era marcada por la música, el glamour y la atención mundial.

El elegante reencuentro de Jerry Hall

Jerry Hall, de 69 años, la supermodelo nacida en Texas que mantuvo una relación con Jagger durante más de dos décadas, también fue noticia. Su vínculo, que comenzó a finales de la década de 1970, dio como fruto cuatro hijos y resistió la intensa presión de la fama hasta su separación en 1999. A pesar de su pasado, Hall y Jagger se mostraron cordiales en la ocasión.

La supermodelo, conocida por su imponente presencia y su melena rubia, fue vista riendo y posando para fotos con su hija, Elizabeth Jagger. Hall, quien finalmente se casó con el millonario Rupert Murdoch , se mostró muy cómoda en la misma habitación que su ex amante y su actual prometida, demostrando la notable cordialidad que existe entre ellos.

La elegancia moderna de Melanie Hamrick

Si las exesposas de Jagger representaban su prominente pasado, Melanie Hamrick representaba su presente . La exbailarina lucía radiante junto a su prometido, imperturbable ante la presencia de su expareja. Hamrick mantiene una relación con Jagger desde 2014 y es la madre de su hijo menor, Deveraux, nacido en 2016.

Los asistentes al evento elogiaron su seguridad y aplomo durante toda la velada. Al preguntarle sobre la considerable diferencia de edad entre ella y la estrella del rock, Hamrick comentó que Jagger es "más joven que yo", y añadió: "Es increíble, de verdad". Su actitud desenfadada reflejaba la fortaleza de su vínculo, basado en la creatividad y la admiración compartidas.

Familia y fama en perfecta armonía

La noche fue mucho más que un reencuentro de antiguos amantes; fue también un evento familiar . Elizabeth Jagger , hija de Mick y Jerry, asistió y brilló junto a sus padres. La modelo y activista hizo gala del glamour heredado y una seguridad natural, simbolizando a la nueva generación de la familia Jagger.

Si bien a la mayoría de las familias les resultaría desagradable un evento de este tipo, los Jagger parecían estar a gusto, lo que demuestra la inigualable capacidad de Mick para combinar fama, familia y amistad incluso después de décadas bajo los reflectores.

La piedra rodante sigue rodando

Más de medio siglo después de que los Rolling Stones revolucionaran el rock & roll, Mick Jagger sigue cautivando. La velada de Jagger en el Baile del Museo Británico, a la que asistieron sus exesposas, su hija y una prometida 44 años menor que él, fue toda una lección de carisma y elegancia.

Aun cuando se acerca a los 85 años, Jagger sigue siendo no solo una leyenda de la música, sino también un símbolo de magnetismo atemporal; un artista de rock que, sencillamente, nunca deja de rodar.